martes, 14 de marzo de 2017

           mitos y leyendas de la region andina

la llorona





Es una leyenda Colombiana de la que se dice que es una mujer convertida en espiritu, esta mujer perdio a sus hijos y dianvula buscandolos en vano,  esta mujer segun testimonios de quienes la han visto grita buscando a su hijos, viste ropa vieja y oscura y carga una manta en forma de bulto en donde se dice carga un feto muerto, encima de su cabeza hay un cuervo simbolo de muerte, ademas se dice que su cara es una calabera y en su nariz cuelga un cordon umbilical,  segun historias ella era una mujer indigena enamorada de un caballero español con el que tuvo tres hijos , al ver que a nivel social no se podian casar la igdignacion la llevo a ahogar a sus tres hijos en el rio, aunque no es la unica historia referente a ella puesto que se dice tambien se ha visto en otros paises como Chile, Argentina, Uruguay ; Costa Rica , Guatemala, El salvador, Panama, Honduras y Venezuela en donde se tiene una historia diferente


el patetarro
Se dice de auqel hombre quien carga solo un pie pues el otro lo tiene podrdi porque tiene un tarro de guadua, el cual se dice tiene un espantoso olor que daña las cosechas, ademas tiene un liquido blancoque sale del tarro el cua deja regado por donde el va pasando, la presencia de el se traduce a inundaciones y mas desastres naturales, se dice que aparece en entidad masculina o femenina, cuando termina sus fechorias hace una risa y unos gritos perversos, se dice que aparece en Antioquia pero tambien en el Choco entre los mineros


la patasola

Se dice de una mujer muy sensual y con una mirada innovadora, la cual vive rodeado por culebras, cuenta la historia  que esta mujer era infiel ante su esposo, quien al enterarse de esta situacion le corto una pierna y se la entrego al amante mientras que el se llevo a la muchcha a la sela va para que ella se muriera lentamente; ella en la selva no se murio por lo contrario le pasaron una serie de mutaciones, aunque muchos dicen que esta fue una historioa creada para asustar a los infieles esta historia es una de las  mas populares de Colombia, segun los que la han visto ella aparece en los andes Huilenses.




maria la larga

Resultado de imagen para maria la larga imagenes

María la larga Es un mito femenino que se conoce en Antioquia y el Viejo Caldas, generalmente en las zonas urbanas. Se trata de una deidad femenina que aparece en las horas de la madrugada, con pies muy altos y brazos descomunales; con el andar en balanceo como el viento. María la larga atrae a los nocherniegos con insinuaciones femeninas; la han visto de noche como una bellísima mujer con miradas insinuantes y sensuales. Cuando la persiguen los hombres, María la larga acelera el paso y así con gran premura sigue el camino hacia el cementerio del pueblo. Cuando el galán se acerca mucho y está listo para abrazarla, María se alarga y se alarga hasta el infinito, infundiendo gran espanto. El mito de María la larga es contado por las gentes de los pueblos, de acuerdo con sus lugares, calles, casas y ubicación del templo y del cementerio; y en la misma forma, con el anecdotario propio de nuestros pueblos que hacen de los mitos una tradición que se transmite de generación en generación. mo una vieja setentona, vestida de negro y con una mantilla verde, que camina con paso menudo y rápido. Es un fantasma dc sacristías, sótanos y callejuelas. Las gentes creen que su visita es presagio de muerte; y cuando en una casa ven a la viudita es señal de que algo grave va a pasar. En Pasto según las referencias del historiador Sergio Elías Ortíz en su estudio “Consejos y creencias de tipo folclórico de la región de Pasto”, la Viuda tenía el papel de conducir a los borrachos que encuentra en sus paseos nocturnos hasta el cementerio de la localidad y dejarlos allí muertos de miedo; en otros casos se contenta con asustarlos. Era una mujer muy bien emperifollada, que hacía mucho ruido con las enaguas. Cuando se ve de cerca a la Viudita, la cara es una calavera que arroja fuego por las órbitas huecas y la boca desdentada’8. La Viudita como María la larga es un mito pueblerino que tiene un anecdotario propio de acuerdo con las regiones y las tradiciones de los pueblos.


el mohan

Antes, mucho antes de trasladarse a vivir a su palacio subterráneo, el Mohán fue un hechicero que convocó tormentas y eclipses. Conocía los secretos de las almas, curaba enfermedades, y todos temían sus ojos de azabache cuando en los ritos atraía la lluvia y las cosechas o se transformaba en un jaguar que recorría las landas de los ríos para ahuyentar los malos espíritus.
Él supo, en una noche de borrascas e inundaciones, de la llegada de los españoles. Vio también la humillación y los despojos de la Conquista. Por eso, tal vez queriendo perpetuar la memoria de los antepasados, se marchó con todos los tesoros a la entraña de los ríos.
Allí permanece, taciturno y remoto entre las piedras, lejos del tiempo, mientras le crecen los cabellos y las uñas y sus ojos desploman la noche.
Junto a los monólogos, a los paseos nocturnos sobre el oleaje de las aguas, el Mohán sigue practicando la música. Por eso, toca la guitarra en las noches de plenilunio.
Algunos campesinos lo han visto aterrorizados descender en balsa, mientras ensaya en la quena una canción desconocida.
Embaucador, pajarero pintado de negro y con dientes de oro, el Mohán puede cambiar de apariencia y aprovechar las brisas de los ríos para la serenata y el vagabundeo por los mercados de los pueblos. En ellos compra tabaco y aguardiente y conquista a las muchachas.
Brujo del agua, el Mohán, sin embargo; ejerce una fuerza feroz sobre los ríos. Regula las crecientes y complica las atarrayas de los pescadores. En algunas ocasiones su celo llega a ser perverso: voltea las canoas y sumerge a las víctimas en el fondo de las aguas. Los viejos pescadores y barequeros saben todo aquello, por eso le temen, por eso llevan en las mochilas tabaco y están pendientes de cualquier señal de indignación de las olas. Saben que su destino, depende del Mohán.

Resultado de imagen para el mohan imagenes


la madre monte

Los campesinos y leñadores que la han visto, dicen que es una señora corpulenta, elegante, vestida de hojas frescas y musgo verde, con un sombrero cubierto de hojas y plumas verdes. No se le puede apreciar el rostro porque el sombrero la opaca. Hay mucha gente que conoce sus gritos o bramidos en noches oscuras y de tempestad peligrosa. Vive en sitios enmarañados, con árboles frondosos, alejada del ruido de la civilización y en los bosques cálidos, con animales dañinos.
Los campesinos cuentan que cuando la Madremonte se baña en las cabeceras de los ríos, estos se enturbian y se desbordan, causan inundaciones, borrascas fuertes, que ocasionan daños espantosos.
La Madre Monte - Mitos y leyendas ColombianasCastiga a los que invaden sus terrenos y pelean por linderos; a los perjuros, a los perversos, a los esposos infieles y a los vagabundos. Maldice con plagas los ganados de los propietarios que usurpan terrenos ajenos o cortan los alambrados de los colindantes. A los que andan en malos pasos, les hace ver una montaña inasequible e impenetrable, o una maraña de juncos o de arbustos difíciles de dar paso, borrándoles el camino y sintiendo un mareo del que no se despiertan sino después de unas horas, convenciéndose de no haber sido más que una alucinación, una vez que el camino que han trasegado ha sido el mismo.
El mito es conocido en Brasil, Argentina y Paraguay con nombres como: Madreselva, Fantasma del monte y Madre de los cerros.
Dicen que para librarse de las acometidas de la Madremonte es conveniente ir fumando un tabaco o con un bejuco de adorote amarrado a la cintura. Es también conveniente llevar pepas de cavalonnga en el bolsillo o una vara recién cortada de cordoncillo de guayacán; sirve así mismo, para el caso, portar escapularios y medallas benditas o ir rezando la oración de San Isidro Labrador, abogado de los montes y de los aserríos